Les comparto que mi abuelo, Santiago Ramírez Hernández, etnolingüista y uno de los pocos académicos que lleva al día la cuenta del calendario Azteca, recientemente fue entrevistado por un medio local de la Sierra Norte de Puebla.
De manera breve puedo decir que es miembro de la cultura Náhuatl, de formación profesional en pedagogía, con estudios de posgrado y docente retirado de la Universidad Pedagógica Nacional, además de una larga trayectoria en el Sistema de Educación Indígena al interior de la SEP.
No puedo dejar de sentirme orgulloso de mi abuelo por ser mi principal inspiración en el ámbito académico y además por ser la expresión viva de nuestra herencia precolonial que forma parte de la cultura mexicana.
Transcribo la nota completa publicada por el periódico semanal La Gaceta de la Sierra en su edición del 10 de marzo de 2014.
IGNORAN LAS
AUTORIDADES FEDERALES EL ADVENIMIENTO DEL AÑO NUEVO AZTECA A CELEBRARSE EN LA
COMUNIDAD DE NOPALA EL 12 DE MARZO
Nopala, importante
área arqueológica abandonada por el INAH
En lugar de
dignificar la comunidad de Nopala, la SEMARNAT y Áreas Protegidas pretenden
instalar un relleno sanitario allí
No solo es una rica
zona ecológica, sino que está en medio de un área protegida desde 1938
Huauchinango, Pue.-
10 de marzo 2014.- NSN.- Abandona el Instituto Nacional de Antropología e
Historia (INAH) el centro ceremonial de Nopala, perteneciente a este municipio
en donde el próximo día 12 de marzo será celebrado, como cada año, el Año Nuevo
Azteca, evento de la mayor relevancia y una tradición milenaria de la que este
municipio es parte importante, desde hace muchos siglos, en la expansión hacia
Centro y Sudamérica de la cultura Mexica.
Como cada año de esta omisión federal se observa que no existe de parte del INAH no solo preparativos sino la difusión adecuada para un evento de esta naturaleza y con ello recobrar una tradición que está latente para ofrecer a la región una importante materia turística tan necesitada en esta comarca serrana.
En plática con el maestro etnolingüista Santiago Ramírez Hernández, heredero de la cultura indígena regional y único serrano que lleva al día la cuenta del antiguo Calendario Azteca, nos explica que será el próximo día 12 de marzo a las seis de la mañana cuando inicie el año nuevo que llevará por nombre Ome Tochtli Xihuitl (Año Dos Conejo) y que corresponde al mes Atlakahualo, en el día Matlakti Sipaktli Tonali (Día Diez Cocodrilo).
En la cuenta del Calendario Azteca, explica, hay cuatro nombres repetitivos que se cuentan cada ciclo y son Tochtli (Conejo), Akatl (Caña), Tekpatl (pedernal), Kali (Casa).
Estos cuatro nombres son los que utilizan para control de los años y de las cuatro trecenas llamadas también "cuatro amarres o Naui Tlilpili, o sea cada 13 años hay un Tlailpili y cuatro Tlaipili conforman un coclo Azteca de 52 años.
Cabe mencionar que dentro de cada año, al finalizar hay cinco llamados días Nemomtemi, que sirven de complemento los 365 días más un cuarto de día (seis horas) razón por lo que, en los Años Aztecas no hay año bisiesto como ara en e año europeo que cada cuatro años el mes de febrero tiene 29 días.
En esta fecha, del año 2014, explica el maestro, el Año Nuevo Ome Tochtli Xihuitl (Año Dos Conejo) corresponde al Cuarto Treceno del último ciclo de 52 años del Calendario Azteca y es el mes Atlakahualo que, si bien en el calendario juliano correspondía al 1 ó 2 de marzo, fue en el año de 1582, al llevarse a cabo la reforma calendárica europea (sic) y entrar en funciones el calendario gregoriano hoy corresponde a los días 11 y 12 de marzo porque con esta reforma la fecha se adelantó 10 días, o sea que en ese momento el día cuatro de octubre, día de San Francisco de Asís, amaneció con fecha 15 de octubre de 1582.
Es por eso, ilustra, que la correlación de los años tienen una separación de seis horas y mientras que todos los años Azteca, los años Tochtli (Conejo) acontecen entre el 11 y 12 de marzo y la cuenta es de 365 días más de un cuarto de día e inician a las 6:00 horas, el último día se prolonga hasta el medio día, seis horas más tarde, instante en que se recibe el otro año llamado Akatl (Carrizo).
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Y así, de esta manera el maestro Santiago Ramírez lleva la cuenta de un importante legado de nuestros ancestros con el que no solo llevaban la cuenta de los días, sino que tenía un sentido religioso, de gobierno, incluso que regía la agricultura y todo relacionado con la ecología y respeto al medio ambiente.
Sin embargo, al paso de los siglos y las nuevas generaciones de gobernantes, ignorantes de la importancia de este evento, no solo no lo lo promueven ni siquiera lo protegen y con ello persiste la sistemática destrucción del importante Centro Ceremonial Azteca de Nopala, ubicado en la comunidad de este nombre, perteneciente al municipio de Huauchinango a seis kilómetros al norte de esta ciudad,
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